Desde el punto de vista sexológico, unas bolas chinas con pesos intercambiables son una herramienta terapéutica muy valiosa. No se utilizan simplemente para el placer, sino como un método para mejorar la salud del suelo pélvico y, como resultado, la calidad de la vida sexual.
 
El factor clave aquí es la capacidad de progresión que ofrecen los pesos intercambiables, lo que permite un entrenamiento gradual y adaptado a la fuerza de cada persona.
 
Fortalecimiento y conciencia del suelo pélvico
 
El uso principal de estas bolas es fortalecer los músculos del suelo pélvico. Al introducirlas en la vagina, el movimiento y el peso interno de las bolas provocan que los músculos se contraigan de forma involuntaria para sostenerlas. Esto tiene múltiples beneficios:
Mejora y previene la continencia: Un suelo pélvico fuerte ayuda a prevenir la incontinencia urinaria que puede surgir por el paso del tiempo, tras un embarazo o a causa de deportes de alto impacto.
Rehabilitación posparto: Son muy recomendadas, bajo supervisión de un especialista, para ayudar a las mujeres a recuperar el tono muscular del suelo pélvico después de dar a luz.
Aumento de la conciencia corporal: Muchas personas tienen dificultades para identificar y contraer estos músculos de forma consciente. El uso de las bolas ayuda a sentirlos y a ser más conscientes de su existencia y función.
 
Mejora de la sensibilidad sexual y el placer
 
Un suelo pélvico tonificado y fuerte es crucial para una vida sexual más plena.Al contraerse de manera más efectiva, los músculos del suelo pélvico pueden llevar a orgasmos más fuertes y controlables. Ademàs el ejercicio con las bolas chinas mejora la circulación sanguínea en la zona, lo que puede aumentar la sensibilidad vaginal y la capacidad de sentir placer durante la penetración. Sin perder de vista que fortalecer estos músculos permite tener un mayor control sobre las contracciones durante el orgasmo, lo que puede prolongar el placer tanto propio como el de la pareja.